De igual forma que tu fisioterapeuta puede usar una pistola de masaje de percusión como parte de su tratamiento, también puedes usarlo tú mismo, tanto para la recuperación muscular posterior a una práctica deportiva, como para complementar tu tratamiento y aliviar molestias musculares.
Mucha gente se pregunta cómo utilizar la pistola de masaje. La verdad es que no es difícil y puede ser muy satisfactorio. Pero hay ciertas cosas que debes saber.
Josh Orendorf, PhD en Fisioterapia, Entrenador Personal NSCA, propietario de Paceline Physical Therapy y especialista en el uso terapéutico de las pistolas de masaje, recomienda el autotratamiento pero con una serie de consignas. A continuación, te mostramos los principales consejos que debes tener en cuenta antes de utilizar tu pistola de masaje basados en las indicaciones de Orendorf y en la experiencia de nuestro equipo con pacientes y personas entrenadas.
CONSEJOS BÁSICOS DEL USO DE LA PISTOLA DE MASAJE
EMPIEZA DESPACIO
Las pistolas de masaje tienen mucha potencia, así que ten cuidado, especialmente si ya tienes dolor. "Comienzo con todos mis atletas en el nivel más bajo y aumento desde allí".
EVITA LOS HUESOS
Si golpeas un reborde óseo, no lo vas a romper, pero probablemente no sea agradable. Es mejor empezar con grupos musculares grandes, como los glúteos, cuádriceps, isquios o gemelos, hasta que te acostumbres a cómo dominar la pistola. “Ve a lo seguro, un músculo es blando y agradable, las articulaciones son complicadas de tratar”.
USA LAS DOS MANOS
Orendorf ofrece este consejo profesional: "Usa tu otra mano como guía para ayudar a identificar regiones óseas a evitar. Además, tendrás más estabilidad, tu experiencia de usuario mejorará y probablemente sentirás mejor en qué zona incidir más".
NO PARES DE MOVERTE
"Asegúrate de no presionar demasiado o permanecer en un mismo lugar durante demasiado tiempo", dice Orendorf. “Puedes hacer fácilmente más mal que bien. Mantén la pistola en movimiento para obtener los mejores resultados, sobre todo de cara a favorecer la adherencia al tratamiento. Al principio lo más interesante es que sea una experiencia agradable".
MÁS NO ES MEJOR
Si bien un masaje manual de una hora puede ser una gran experiencia, con la pistola no necesitas más que unos minutos para conseguir el mismo efecto. Intentar prolongar la sesión, pensando que conseguirás más beneficio no es una idea. Unos minutos es tiempo suficiente para obtener todo el beneficio del tratamiento sin causar trauma o molestias en el área.
CONCLUSIÓN
Como con todas las cosas, debes ser inteligente y aprender con cautela cuando uses una pistola de masaje por primera vez. "Esto parece bastante obvio, pero asegúrate de evitar las principales arterias, nervios y órganos internos", dice Orendorf. "Aunque no sepas nada de anatomía, simplemente presta atención a cómo responde tu cuerpo y para si sientes que algo no va bien".
Orendorf también enfatiza que las pistolas de masaje no son una solución única para todos los problemas musculoesqueléticos. Sin embargo, sí son una parte de un plan de tratamiento global. "Me encanta usar una pistola de masaje como parte del programa de rehabilitación de un atleta, pero soy consciente de que no va a reparar mágicamente una lesión", dice. "Ponte en manos de un profesional si tu lesión no mejora".